Enclavada en el mar frente a las costas de la provincia La Altagracia se encuentra La Isla Saona, pequeña porción de tierra bañada por cristalina agua azul turquesa. 6 de la mañana, hora de encuentro para partir a la pequeña isla, a un oscuro, esperando el amanecer 32 personas abordamos un autobús con el fin de visitar la Isla Saona.
A las 7:05 minutos arrancó el motor del autobús indicando que iniciaba nuestro viaje de 3 horas hacia el puerto de la Bayahibe, donde partiríamos hacia la isla.
Luego del almuerzo cada persona del grupo hizo lo que le interesaba y alrededor de las 3.30 partimos de vuelta hacia el puerto y posteriormente a Santo Domingo.
Fue un trayecto animado y divertido, en el autobús tuvimos animación activa desde el momento de la partida hasta que arribamos al puerto en Bayahibe.
Desde la playa de Bayahibe nos embarcaremos en un bellísimo Catamarána las 10:30 de la mañana. Durante la trayectoria hacia la Isla Saona en el catamarán disfrutamos de snacks y bebidas nacionales alcohólicas, refrescos y agua. A las 12:00 A.M. llegamos a la Isla. Hicimos una parada en una preciosa piscina natural por 30 minutos, donde pudimos juguetear con múltiples peces de colores y ver estrellas de mar.
A ritmo de merengue fuimos recibidos en la pequeña isla, que cuenta con 500 habitantes aproximadamente.
Todos con notable entusiasmo procedieron a ponerse sus trajes de baños para darse un chapuzón en las cristalinas aguas que bordean la isla. Otros no tan deseosos de agua realizaron otras actividades recreativas en la isla.
Aproximadamente 1 hora después de nuestra llegada recibimos el aviso de poder pasar al bufé, lleno de variedades exquisitas de nuestra cultura: moro de guandules, pescado frito, arroz blanco, habichuelas, pollo guisado, cerdo guisado, ensalada verde y ensalada de pasta.
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